sábado, 9 de mayo de 2009

Hay algo que quiero contarte con palabras sencillas y que es muy probable que no entiendas. El día sigue teniendo 24hs; y después del 3, viene el 4,después el 5 y así hasta el 30, o 31 de vez en cuando. Si ya sé que hay algunos años bisiestos, pero te aseguro que eso no tiene que ver con vos, pasa desde siempre. Esa cafetería sigue en la misma esquina, vendiendo el mismo café rancio, con las mismas sillas y el mismo viejo que lee el diario todos los días. Sigo llegando a todos lados 10 minutos tarde, o capaz todos siguen llegando 10 minutos antes; y sigo apostándole estupideces a la gente que sé que me deja ganar. Sigo tocando los timbres de las mismas casas, solo por la euforia del milisegundo; y es más, mi timbre sigue siendo el mismo, por si algún día quieres sentir vos la euforia. Sigo usando el mismo estilo de ropa. Sigo tropezándome con las mismas baldosas, como para no perder la costumbre, ¿Otra cosa?, el negro sigue quedando espantoso con el marrón. “Para siempre” sigue significando, por lo menos para mi, dos o tres días, quizás 5 meses. Sigo yendo a las mismas fiestas, con la gente de siempre. Además sigo riéndome de los mismos chistes pelotudos. Sigo subestimando a la misma gente. Escucho la misma música, todavía no me di por vencida. De vez en cuando escribo en el mismo cuaderno viejo algunas ideas voladoras que me surgen, después entro al Word y lo paso en limpio como para que sea un poco más comprensible, igual, doy por sentado que nunca lo vas a leer y si lo lees dudo de tu habilidad en comprensión de textos, ya te dije que sigo subestimando a las mismas personas de siempre, y una de ellas, sos VOS.

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