sábado, 15 de agosto de 2009


Cuando te detenés a mirar el mundo, a observar la belleza que nos rodea, cuando te reís hasta que no podés más con tus amigas, cuando hacés lo que amás hacer, cuando viajás a un lugar que no conocés, cuando escribís una canción, cuando se te acelera el corazón ante una mirada, cuando haces el amor, cuando amás a un chico… te sentís viva. Pero no sólo la felicidad te hace sentir viva, sino también saber que dejás un testimonio de tu vida; saber que cuando ya no seas, algo de vos seguirá vivo en lo que vendrá .

No hay comentarios:

Publicar un comentario